En este mundo virtual podemos encontrar mucha y variada información sobre los beneficios que nos aporta la práctica de la marcha nórdica. Pero quizás esa parte virtual nos aleja de la realidad y leemos pero no aplicamos.
Está claro que este deporte se ha popularizado y caminar llevando dos bastones con dragoneras de marcha nórdica parece suficiente para obtener los beneficios prometidos. Lo siento, pero no estoy de acuerdo.
Huir del sedentarismo y hacer actividad física es la mejor de las decisiones y aplaudo y brindo por este esfuerzo personal. Pero “todo vale”, no. Practicar marcha nórdica con una técnica bien ejecutada que consiga elasticidad y tonificación muscular no es fácil, aunque si asequible a la mayoría de las personas, pero siempre y cuando nos impliquemos consciente y físicamente.
Os incluyo un link para analizar, para criticar, para pensar.